Los métodos no importan
Llegó
la condena anunciada, a pesar de que en el juicio no se pudo probar que
Vanderbroele fuese el testaferro de Boudou (ni siquiera se conocían).
Ni de dónde vino el dinero ni quién se encargó del management. La
frutilla: la prisión del ex vicepresidente, contra todos los
antecedentes del Tribunal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario