En enero de este año, a solamente un mes de haberse instalado
la gestión virreinal cuyas cabezas visibles y tras bambalinas son suficientemente
conocidas, el jurista Eugenio Raúl Zaffaroni advirtió: “Van a matar a alguien,
no sean brutos”.1 A la acción homicida la entendemos en un amplio
espectro: no solamente quitar la vida de manera inmediata y directa,
premeditada o no, sino afectando los valores in intrínsecos de la vida:
libertad, felicidad, progreso, salud y desarrollo cultural y económico.
Ahora, los periodistas populares de la revista villera La garganta poderosa, que han sido
amenazados reiteradas veces por fuerzas de seguridad desde que se instaló el
virrey2, denuncian:
Analicemos cuidadosamente qué pasa, por qué y para qué
Seremos nosotros sumamente sucintos. Vosotros, ustedes, en
Argentina, América, Suramérica, Europa, Asia, Oceanía o África a partir de
sentimientos, principios y saberes específicos o generales reflexionen y, por
sobre todo, en relación con nosotros los suramericanos, actúen coherentemente,
porque opinar y decidir son también acciones: eviten ser brutos, disculpen esta
sincera precisión.
«Le advertí que
no quería torturas, que eso no lo íbamos a permitir y él me respondió: “Hermana,
hay casos en los que esa metodología es la única que da resultados”.»
El diálogo fue
en 1991 entre la religiosa católica Martha Pelloni y el subcomisario Luis
Abelardo Patti, a quien el entonces cabeza del gobierno argentino Carlos Saúl
Menem había encomendado investigar el sonado asesinato de la joven María
Soledad Morales en la capital de la Provincia de Catamarca. Está, ese diálogo,
en Patti: Manual del buen torturador3,
editado por el Centro de Estudio Sociales y Legales (CELS). Vale recordar que
en aquella oportunidad de abuso sexual y asesinato participaron hijos de
miembros del poder político cercano, precisamente, a Menem.
El “trabajo” de
ser brazo armado del poder político
A inicios de
aquella década tuve una entrevista periodística pero sin registro de ningún
tipo con el jefe de la entonces existente Unidad Regional General Sarmiento de
la Policía de la Provincia de Buenos Aires, con sede en San Miguel y
competencia en una amplia geografía. El tema convocante fue el subcomisario
Patti, quien había salido a la notoriedad por los aprietes “correctores de
jóvenes” que practicaba en la cercana y todavía casi rural ciudad de Pilar.
Soslayó la
cuestión el comisario mayor de quien no recuerdo nombre ni apellido y que en la
larga conversación aludió a temas que hacían a las peculiaridades de lo que
llamaba su trabajo. Patti ya había sido trasladado y no quería opinar. Destacó
dos cosas: que su quehacer era sumamente insalubre y que nunca en toda su
carrera (de más de veintitantos años) se había desempeñado en unidades
policiales cercanas a su domicilio familiar, en una ciudad del centro de la
provincia. Los fines de semana, si nada se atraviesa, dijo, estoy con mi mujer y mis hijos
adolescentes.
Más o menos así
ejemplificó lo de la insalubridad. Tuvimos hace unos días un procedimiento
ordenado por la Justicia, fue tremendo, dijo. Allanamos el aguantadero de una
banda que robaba autos de lujo para traficarlos en países vecinos, hubo
resistencia y tiroteo: dos delincuentes y un policía muertos. Al policía, un
cabo, yo le tenía estima, manifestó con gesto de que se le va a hacer. Después
de los peritajes técnicos y los del médico forense más los traslados de los
presos y los cadáveres, ya de madrugada –concluyó–, invité a los muchachos a
comer pizza acá a la vuelta… Uno se endurece, se hace mierda…
Comprendo,
interrumpí, pero ustedes participaron en la represión de la Dictadura,
maltratan a los muchachos díscolos, protegen a alguna gente que… Retomó su
palabra mirándome a los ojos y reiteró eso de endurecerse y hacerse mierda,
para agregar: es nuestro trabajo, nos pagan para ser brazo armado del poder
político.
“Vení y rompé
todo”
Esta consigna en
las redes “sociales” difundía la celebración de una “fiesta privada” en las
cercanías de La Plata –capital de la Provincia de Buenos Aires– para el día
viernes 1° de enero de 2016 recién estrenada María Eugenia Vidal como «Governor of Buenos Aires Province desde 2015», según Google en español indica su perfil . El primer sábado de enero fue noticia la
aparición del cadáver abandonado en una calle de una muchacha de veintiocho
años que, después se supo, habría fallecido ahogada en la piscina de la casa de
“la fiesta”. La fiscalía interviniente vinculó a la investigación al dueño de
esa residencia, Carlos Federico Bellone, y a otros tres hombres, entre ellos
destacan particularmente dos: Gastón Haramboure (“relacionista público” [!] que había sido
recientemente condenado a diez años de prisión por su participación en la muerte
a golpes de Juan Andrés Maldonado en 2009, y que se encontraba en “goce” de prisión
domiciliaria)4 y Raúl Ismael “El Peque” García (“coordinador de
turismo” [!]), al que las fotografías publicadas en Twitter y que no tienen
marcas de adulteraciones tecnológicas caracterizan con cierta precisión:
“Este día de la madre regalate verla feliz”
Dice el diccionario que en su primera y principal acepción regalar es «Dar a alguien, sin recibir nada a cambio, algo en muestra de afecto o consideración o por otro motivo».
Es decir se trata de una acción generosa, afectiva y noble. Las y los lingüistas
podrán explicar la calidad gramatical de su empleo como verbo pronominal, que
sería el caso de la frase en cuestión.
Lo esencial sintáctico en la construcción dada es que hace
evidente en la acción sugerida no importar la madre en sí sino uno mismo, es
decir: uno, sujeto de la acción, se gratifica a sí mismo cuando cree que ha
motivado satisfacción al cumplir haciendo un obsequio en oportunidad del día
que convencionalmente se dedica a homenajear a las madres. La “felicidad” de
ésta le importa menos que su propia satisfacción. La consigna comercial trastrueca
el carácter de la acción de regalar. Es la expresión y promoción de una visión
individualista y egoísta de la existencia: una visión brutal.
La frase del subtítulo ha sido distribuida millones de veces
y expuesta en su escaparate virtual por una empresa que, explicó Mauricio Macri
en oportunidad de una visita que hiciera a su sede, ofrece puestos de “empleo
de alta calidad”5. En la Bolsa de Nueva York la suma de sus acciones
cotizan más que las de la petrolera YPF (!), siendo que sus bienes materiales
son ínfimos en relación con los de la petrolera. Es el precio de lo “intangible”…
Probablemente Macri dijo que se trataba
de “empleo de alta calidad” porque lo que los televidentes verían en la
oportunidad fue muchos jóvenes ubicados frente a terminales informáticas, los
que probablemente solamente controlaban millares de intercambios comerciales
casi automáticos de artículos nuevos o usados entre vendedores y compradores online y de valores, los artículos,
tanto irrisorios como no… Nuevamente cabe la calificación: una interpretación
brutal.
Compañeros de Garganta poderosa,
¡estamos con ustedes!…
Parafraseando al francés Georges
Benjamin Clemenceau (1841- 1929), quien durante la Primera Guerra Mundial
sentenció aquello de que «La guerra es un asunto demasiado importante para dejarlo
en manos de los militares», entendamos ahora y exijamos que la política, la
economía, la salud, la educación y formación intelectual, el desarrollo
económico, el progreso y hasta la defensa y seguridad de los pueblos son asuntos
demasiado importantes para dejarlos en manos de gerentes y capataces, por más “capitanes”
que estos sean.
Notas:
1 Ver en http://gervasioespinosanotas.blogspot.com.ar/2016/01/zaffaroni-van-matar-alguien-no-sean.html
| Publicación original en http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-289956-2016-01-10.html
5 En http://www.infobae.com/economia/finanzas-y-negocios/2016/08/16/mercado-libre-anuncio-una-inversion-de-1-500-millones-y-5-mil-puestos-de-empleo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario