Tristeza não tem fim / Felicidade sim…
(Vinicius de Moraes -
Tom Jobim)
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ÚLTIMO MOMENTO (7.9.2015 hora 19:15):
Esta tarde el diario El País, de Montevideo, reflejó así la noticia oficial aceptando la
resolución del Frente Amplio, y el comentario al respecto del senador y ex
candidato a presidente por el Partido Nacional Luis Lacalle Pou (se ha
respetado la importancia gráfica dada en la edición digital del diario).
http://www.elpais.com.uy/informacion/consejo-ministros-tisa.html
torre ejecutiva
Tabaré Vázquez pedirá
al canciller que no se siga negociando por el TISA
Hoy lunes el Consejo de Ministros analizó en su encuentro
semanal el rechazo que el Frente Amplio expresó días atrás a las negociaciones
de Uruguay por el TISA. Y decidió asumir la misma postura, pidiendo al
canciller Rodolfo Nin Novoa que no se negocie.
LUIS LACALLE POU
«Queda claro que
Vázquez no manda, que no ejerce la autoridad»
Para el senador nacionalista que «eso ha quedado demostrado
en tres aspectos: cuando no pudo con el conflicto en la Educación, con lo del
TISA y en el hecho de que no puede con la inseguridad».
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Para los pueblos latinoamericanos hay en ciernes peligrosísimos
riesgos. Abruptos retrocesos políticos en países como Argentina, Brasil,
Venezuela o Uruguay, relevos de sus actuales políticas de Gobierno, sean por cambios
en tiempos y formas legales –comicios ordinarios o excepcionales–, golpes o autogolpes
como el de Bordaberry en 1973, giros copernicanos en programas y planes gubernamentales,
o retrocesos parciales, sean aislados o no, como consecuencia de derechización en
las coaliciones de gobierno. En estas naciones o en otras a las que no
referimos ahora: Chile, Ecuador...
Una aviesa argucia para justificar volantazos a la derecha
es la tan declamada necesidad de pertenencia al mundo global –como si a éste, y
a sus conflictos, pudiera no pertenecerse–, que sin sutilezas expresan los
encolumnados con los Gobiernos de las potencias capitalistas dominantes.
Afirma Lula da Silva, quien aunque perteneciendo a una generación
posterior es notoriamente connacional de Vinicius de Moraes y Tom Jobim,
autores de A felicidade:
Quiero
que [en Argentina] gane las elecciones alguien que quiera mantener una buena
relación con Brasil. Alguien que vea a Brasil como socio y no como adversario.
Que quiera acrecentar la relación comercial, política y científica entre los
dos países. Por eso no debe haber retroceso. Ya sufrimos la era militar. Ya
vivimos la etapa de Carlos Menem y Fernando Henrique Cardoso, cuando fueron
desmontados el Estado argentino y el Estado brasileño. Después pasamos por
momentos de dificultades pero más tarde vino la bienaventuranza para nuestros
pueblos. Hoy el momento es difícil. Ahora tenemos que buscar más que nunca esa
aproximación.1
Otro país
En Montevideo, Uruguay, un diario “doctrinario” y de clásica
lectura por parte de las capas medias de la sociedad rioplatense oriental, El País, no sólo refleja la tendencia de
otros medios regionales como O Globo
o La Nación sino que en su específico
ámbito local es un eficaz formador de opinión. Este viejo matutino en papel
(1918) y portal digital publicó el pasado viernes 4 de septiembre un artículo
editorial –“Los frutos de un régimen”2, que alude a los gobiernos de
Venezuela, Brasil y Argentina, además del que tiene asiento en Montevideo, socios
de éste en la UNASUR y el MERCOSUR– precisamente cuando Tabaré Vázquez, sin
ninguna duda más lector de El País
que del matutino cooperativo La Diaria,
visita en Brasilia a Dilma Rousseff.
Pero no solamente hace eso. También publica que «El
vicepresidente brasileño, Michel Temer, opina que “será difícil” que la
mandataria Dilma Rousseff “resista” hasta el final de su mandato en 2018, si el
apoyo de los ciudadanos a su gestión, actualmente de un 8 %, no crece, según
declaraciones difundidas hoy por la prensa local»3.
“Lo
que deberíamos buscar es fortalecer al gobierno”
El mismo El País de
este domingo 6 de septiembre destaca las expresiones del ex frenteamplista
demócrata cristiano y ahora senador por su Partido Independiente, Pablo Mieres,
quien, refiere, «dijo que no apoyar las negociaciones del TISA esta “casi al límite
de lo ridículo”, pero hay que “tener cautela” porque no debería ser al
canciller [Nin Novoa] a quien se le […pidan] explicaciones, “sino a los demás.
Lo que deberíamos buscar es fortalecer al gobierno”»4. Mieres5
obtuvo su bancada unipersonal en el Senado y tres diputaciones en octubre de
2014 colectando 73.379 votos (3,03 % del total).
En el mismo artículo la noticia principal tiene como
protagonista a Pedro Bordaberry, hijo de quién diera fundamento a la expresión
política con la que se conoce un modo de autogolpe de Estado, y fuera candidato
a presidente en 2014 por el Partido Colorado (no llegando a obtener siquiera 13
% de los votos). El medio cita declaraciones de Bordaberry a una radioemisora
de Montevideo, Monte Carlo,
manifestando que frente a la incorporación de Uruguay al mentado TISA (sigla en
inglés del Acuerdo de Liberalización del Comercio de Servicios) no es válida la
resolución del plenario político del Frente Amplio –el partido de gobierno,
carácter que no toma en consideración el político colorado –, sino que debe ser
resorte del parlamento: «“para que discutamos ahí si Uruguay tiene que seguir
negociando o no” por el TISA, ya que es “en ese ámbito” que se debe discutir».
Dos párrafos más de la nota argumentan así (se conserva la
redacción original, pese a sus errores de sintaxis y ortografía):
Y
agregó que ayer también se lo comunicó al mismo ministerio de relaciones exteriores,
señalándole que “no es nada contra él, sino que es para que los uruguayos nos
demos la discusión y que el presidente de la República y en canciller tengan en
cuenta que “el 70% de los uruguayos queremos seguir adelante”.
En la misma línea se expresó el senador nacionalista Álvaro Delgado: “No me parece que sea correcto que las decisiones importantes para Uruguay terminen condicionadas por la mesa política del Frente Amplio”.6
En la misma línea se expresó el senador nacionalista Álvaro Delgado: “No me parece que sea correcto que las decisiones importantes para Uruguay terminen condicionadas por la mesa política del Frente Amplio”.6
El diario se hace amplificador de una argucia aritmética
mentirosa, dando como representativa de «70 % de los uruguayos» a solamente
55,7 % de electores en octubre de 2014, suma de 30,88 % de quienes votaron al
Partido Nacional (Blanco), 12,89 % al Colorado, 3,03 % al Independiente más 8,65
% de quienes votaron a la corriente que lidera el ministro de Economía y
Finanzas, Danilo Astori, acompañado por Rodolfo Nin Novoa (18,1 % de 47,81 % de
votos del Frente Amplio). Ahora, tras una amplia discusión pública y en una
consulta ex profeso sobre si es conveniente o no ingresar al TISA, aquel
hipotético «70 %» muy probablemente no podría siquiera superar a 45 % de apoyo
que obtuvo en 2014 la propuesta de reducir la edad de imputabilidad penal.
Por los andariveles de El
País también se mueve El Observador,
y con leves matices de diferencia el diario que ahora regentean empresarios
argentinos, La República, otrora con
un equipo periodístico más calificado, en el que parece pisar fuerte la
minoritaria corriente que comandan Astori y su vocero político, Esteban Valenti.
Nunca abandonó la
afición por la actividad náutica
Del lado occidental y a unos veinte kilómetros de la
desembocadura de su cauce en el gran estuario Del Plata, frente al río Luján y
en un delta plagado de riachos y arroyos, en Villa La Ñata vive desde 2006
Daniel Scioli, el candidato presidencial argentino acordado en la cúspide del
Partido de la Victoria no sin algunos enojos explícitos o en sordina en el
propio kirchnerismo. Él es consciente de que todavía inspira desconfianzas en
sectores del progresismo y la izquierda que integran o acompañan al Frente para
la Victoria del cual el partido casi homónimo es cabeza en sociedad con el
justicialismo. Sobre la presencia en la fórmula de Carlos Zannini (“El Chino”)
se han ensayado hipótesis probablemente no muy disparatadas que refieren a
salvar la continuidad política ante eventuales situaciones de grave emergencia.
En los días que vienen y en varios actos de campaña electoral Scioli será
acompañado por Lula da Silva.
¿Podrían haber acumulado más apoyos en las PASO (primarias
abiertas simultáneas y obligatorias) los ministros Agustín Rossi o Florencio
Randazzo, el ex canciller Taiana o el gobernador entrerriano Uribarri? Nunca
podrá saberse. Lo que ahora está claro es que la corporación mediática, el political-trainer y mánager Durán Barba y los pupilos Sergio
Massa y Mauricio Macri expresan cabalmente el retroceso hacia las experiencias de
desmantelamiento económico con Menem, desmantelamiento político con De la Rúa y
las crisis monumentales de los años 2001 y 2002 consecuencia de aquellos. De un
nuevo momento así a la barbarie social, la anarquía política y la invasión
depredadora con bombardeos y tropas mercenarias más el saqueo generalizado de
riquezas naturales solamente mediaría un tris.
Bifurcaciones
Un viejo chiste “zurdo-peronista” tanto estuvo en boca de izquierdistas
de presumidas ortodoxias como en la de miembros de la juventud peronista, desde
cuando el 1º de mayo de 1974 Juan Perón calificara de “estúpidos imberbes” a
los congregados bajo las banderas de Montoneros que a voz en cuello coreaban «¡Qué
pasa, qué pasa, qué pasa, General, que está
lleno de gorilas el gobierno popular!». El chiste, recuerdo, decía más o
menos así: Iba Perón en un auto conducido por un chófer y al llegar a una
bifurcación del camino le indicó a éste que accionara las señas de que tomaría
el camino de la izquierda, pero que decididamente girara ingresando al de la
derecha. Hubo otros chistes de parecido tinte, pero más brutales.
Jorge Luis Borges, un hombre de la cultura porteña que frecuentó
en su crónica poética a la franja orillera de la ciudad de inicios de la
primera mitad del siglo XX, que tuvo cuna de plata y compartió la Argentina
oligárquica pero sin duda fue un gran literato, es autor de un cuento entre
policial y filosófico con un espía japonés como protagonista y cuyo desarrollo
transcurre en la Inglaterra de la Primera Guerra Mundial: “El jardín de
senderos que se bifurcan” (1941).
Pone Borges en ese interesante y breve cuento, en boca de su
protagonista, el que espía para Alemania y que, tras apearse de un tren en Ashgrove,
halla unos niños que adivinan a dónde va y le indican como en cada bifurcación
optar por una senda para llegar sin extraviarse, pone en boca de aquél –decía–
la sentencia de un bisabuelo también japonés: de los laberintos solamente puede
salirse girando siempre hacia la izquierda.
Y no siendo para nada ingenuos a nosotros nos parece igual, de
los laberintos políticos no se sale con ideas y actos de derecha sino con
ideología y acción consecuentemente populares, con políticas de izquierda.
La alusión que hicimos a los chistes de señalero o guiños
para un lado y volantazos para otro, la estrecha y sin duda consecuente
adhesión de Lula a la candidatura del dúo Scioli-Zannini en Argentina, los
dimes y diretes circulantes –que hay que tener en cuenta y escarbar en ellos–
sobre corrupción económica (sobreprecios y retornos) alrededor de los partidos
gobernantes en Brasil, Venezuela, Uruguay y Argentina, son en definitiva
situaciones que tienen como responsables principales a los mismos que promueven
a los “salvadores” de nuestras naciones.
Digámoslo más claro. Si hay coimas es porque hay quienes
coimean, los que por razones que convendría conocer tienen fácil disponibilidad
de dinero o que, para eso, “inflan” precios que posibilitan “retornos” que, a
su vez, facilitar la reproducción de sus negocios y modus operandi. Esto en primer lugar, es decir, hay retornos cuando
hay capitalistas. Además, y concomitantemente, el “aggiornamento” de la
política desplazó a la militancia de las pintadas callejeras y las pegatinas de
carteles con engrudo, de los piquetes de propaganda y la “autodefensa”
convirtiendo su existencia, cuando la hay, en ultra específica o meramente
testimonial. La “profesionalización” de los relevamientos de opinión ciudadana
y de la publicidad que reemplazó a la otrora “agitación” son cotizados
servicios del “mercado político”: para acceder a ellos hace falta plata, mucha
plata (sólo una gigantografía del tamaño adecuado para una carretera en las que
los vehículos se desplazan a cien kilómetros por hora, de diez metros por diez
metros, por ejemplo, instalada durante un mes implica un “gasto” de no menos de
ciento cincuenta mil pesos argentinos, unos quince mil dólares).
Muchos partidos políticos de extracción popular cayeron en
la volteada: consideraron natural actualizarse en el uso de las nuevas
tecnologías y modos de relación social, implicando todo ello también
adecuaciones ideológicas. Hace veinte años, en 1995, un recién incorporado
parlamentario municipal en la Provincia de Buenos Aires que había sido elegido
por el voto a una agrupación de centro izquierda, me convocó para conversar. Me
relató que a través de una tercera persona el intendente también recientemente
en funciones le había hecho una oferta: agregaba de manera discreta a la dieta
legal una suma igual con la condición de que votara a favor no más de un
proyecto por mes que él mismo, el intendente, propondría.
Me preguntó qué opinaba. Le dije que si él aceptaba ese
trato yo inmediatamente lo denunciaba públicamente. El recién inaugurado
parlamentario de entonces me refirió que no compartía esa opinión un miembro
calificado de su equipo, a quien yo conocía. Me explicó que esa persona sostenía
que tales recursos se podían destinar a solventar otros gastos, viáticos para
militantes, propaganda, etc. Me dijo, también, que ese miembro de su equipo
había sido pocos años atrás compañero de partido conmigo.
Tras veinte años desde entonces el intendente de ese
municipio sigue todavía en funciones, siendo ahora parte del agrupamiento que
lidera Sergio Massa: “El cambio justo”.
Notas:
1 “Que gane alguien que quiera una buena relación con
Brasil”, por Martín Granovsky, Página/12,
6.9.2015, en http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-281063-2015-09-06.html
2 Con el título de “Los frutos de un régimen” el diario
El País, de Montevideo, editorializa
afirmando que «La crisis del “progresismo” latinoamericano es evidente y se
debe no tanto a la acción de los factores externos, sino a circunstancias
internas. Pocas veces la economía mundial fue tan propicia, durante tanto
tiempo, para estos países, principalmente exportadores de productos primarios,
desde petróleo hasta soja», para luego apuntar ex profeso hacia Venezuela. En
un abstract o copete publicado en la
portada de su edición digital, debajo del título aludido dice: «La expulsión,
directa o indirectamente forzada, de colombianos residentes en la región
fronteriza de Táchira, en Venezuela, refleja la verdadera naturaleza del
régimen de Maduro. Como todo gobernante populista fabrica enemigos para
culparlos de sus fracasos y aglutinar al pueblo detrás de sí». Véase en http://www.elpais.com.uy/opinion/editorial/frutos-regimen.html
3 “El vicepresidente de Brasil ve ‘difícil’ que
Rousseff culmine su mandato”, en
6 Ídem nota 4: http://www.elpais.com.uy/informacion/bordaberry-citara-nin-tisa-senado-parlamento.html
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