A los lectores de los pueblos de América del Norte, a los de
Nuestra América, la latinoamericana, desde el trópico hasta el hielo austral,
desde un océano al otro, a los lectores europeos, del Este y del Oeste, del
Norte y del Sur, a los de Oceanía, a los de India y de China, de África y del
cercano, del medio y del lejano Oriente. A todas y todos pido disculpas, un
trabajo emprendido en el oficio del cuidado de textos me lleva las horas, estoy
ausente, no me alcanza el tiempo.
Temas importantes no serán abordados como hubiera querido,
como ustedes hubieran querido. Hoy, 1º de Mayo, Día Internacional de los
Trabajadores, llamémonos a la reflexión, al rescate de nosotros mismos, de la
clase, de la solidaridad, del mundo mismo. No es fácil sino imprescindible.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos cederá al
reclamo de su Propio Premio Nobel de la Paz, aprobará entregar armas letales
por 200 millones de dólares al Gobierno ucraniano de Kiev. Serán fusiles,
bombas y munición para derramar más sangre.
Cerca de Washington, en Baltimore, han detenido a un
acosador, a un joven que intimida y pone en peligro a la policía del estado de
Maryland: es quien con su teléfono móvil fotografió el momento en que era
brutalmente apresado Freddie Gray, luego aparecido muerto en la celda custodiada
por asesinos.
Hoy mismo, en Estambul, Turquía, han golpeado y detenido a
ciento cuarenta trabajadores como consecuencia de la represión contra varios
miles que se aprestaban a conmemorar el 1º de Mayo en la céntrica plaza Taksim.
Aquí nomás, cerca de nosotros, a solamente unas decenas de
kilómetros, un presidente de Corte dijo muy suelto de lengua y de cuerpo
entero, días pasados, que la Justicia no debe gobernar pero sí controlar a
quienes gobiernan. Es decir: puede impedir el gobierno de las vidas y de las
cosas ya que Gobernar no puede. Que le den a ese presidente un premio de
filosofía oscurantista, ya que plata ni oro necesita.
Un poquito hacia oriente, no mucho, cruzando el estuario, el
agua huele mal y las fuentes hídricas salvadas de la privatización se han,
igual, echado a perder. Los especialistas hablan de eutrofización de los ríos y
lagunas, que tienen en exceso nitrógeno y fósforo aportados por los señores del
campo. El agua es del pueblo, pero enferma. Se trata de un deterioro biológico.
Pero no tanto de un deterioro senil particularizado en personalidades.
Se trataría de una suerte de difusa esclerosis ideológica que impide discernir
y ataca en ciertas franjas de la población mundial sin importar la edad y las
convierte en incapaces de mandar parar. Es un cuadro grave, en lo individual
puede ser irreversible, aunque en el cuerpo social se puede controlar, bloquear
su propagación, disminuir y hasta sanar.
Repito lo que dijo hoy Malvina, hija de Agustín Tosco,
fallecido de cáncer en noviembre de 1975, hace casi cuarenta años, líder
sindical de mil luchas y del histórico “cordobazo” de 1969, cuidado celosamente
en la clandestinidad, hasta morir, el “Gringo”, por maternales y fraternales
compañeras y compañeros del PRT argentino: dijo que su papá decía que el 1º de
Mayo es un día de fiesta por las conquistas logradas, pero que principalmente
es un día de lucha y de reflexión.
Deseo regresar pronto…
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